Llevo dias hablando con amigos de Valencia y todos coinciden en lo mismo:
No saben si lo peor ya ha pasado o es lo que viene ahora.
A aquellos que han tenido la fortuna de sobrevivir a la tragedia ahora les toca reconstruirlo todo.
Desescombrar sus calles.
Rehabilitar sus casas.
Poner de nuevo en marcha sus pequeños negocios.
En definitiva, empezar de cero.
Te puedes imaginar la incertidumbre, frustración y desesperación de miles de familias a las que les ha cambiado de la vida en un abrir y cerrar de ojos.
Y están solos.
Como era de esperar, las instituciones les han dejado tirados.
Solo cuentan con sus propias manos y las de cientos de voluntarios procedentes de todos los rincones del país.
Voluntarios que tarde o temprano no tendrán mas remedio que volver a sus casas.
La cosa está complicada.
La maquinaria pesada para desescombrar y limpiar las calles está llegando con cuentagotas.
El material y la ropa de trabajo escasean.
Empiezan a brotar enfermedades por pasarse horas y horas metidos en el fango.
Por eso, nuestra ayuda para la recuperación de la zona es necesaria y va a seguir siendola durante mucho tiempo.
La prioridad ahora, sin duda es aportar fondos para la compra de equipos o para el alquiler de maquinaria, o donar ropa de trabajo y herramientas.
Hay muchos canales para hacerlo.
Elige el que mas te guste.
Hagamos entre todos que las personas afectadas se sientan arropadas.