No se a quién se le ocurrió la idea de echar mermelada de frambuesa encima de la tarta de queso, pero deberían haberle ajusticiado en la Plaza de la Cebada.
Como se hacía antiguamente.
A él y a todos los descerebrados que le copiaron la receta.
Porque destrozar este manjar con semejante brebaje es un delito imperdonable.
¿Qué tiene que ver la tarta de queso con el mundo inmobiliario?
Nada.
Bueno, una cosa sin importancia.
Que en Estados Unidos es habitual que los inquilinos, cuando alquilan un piso, le preparen una tarta al casero o tengan un detalle con él.
Para empezar con buen pie, ya sabes.
Puedes haber sido maltratado durante el proceso de selección, te has podido dejar un dineral pasando filtros, pero eso no cuenta.
Lo importante es que el piso ya es tuyo y tienes que tener contento al casero.
Mira.
Mi amigo Paco, que cruzó el charco hace poco, me contó el otro dia en detalle su experiencia.
Copio y pego tal cual.
Atento.
“Aparte de los 50 pavos por participar en el proceso para que te consideren como inquilino, hay otros 50 pavos de la empresa que certifica tu calidad crediticia (credit Score) que tambien son non-refundable.
Luego, depende de esa calificación, te piden uno, dos o tres meses de adelanto, mas la fianza.
Si pasas la prueba de las mascotas, te suben el alquiler 50$ por cada mascota que tengas.
El seguro de hogar lo paga el inquilino, De hecho hay un seguro especifico que ofrecen todas las compañías de seguros que es el “renter’s insurance”. Cuando le dije a mi casera que esto en España lo paga el propietario se me rió en la cara.
Has de certificar nombre y edad de todos los que van a vivir en la casa y, si tienes niños pequeños, plus porque rompen cosas, pagas mas por el alquiler y por el seguro.
Y todo eso con la mejor de las sonrisas y los inquilinos, cuando les aceptan vivir en una de sus casas hasta les hacen regalitos, una plantita o una tarta.
PD. Yo pago 1950$ por un adosado de tres habitaciones y 2 baños y medio con garaje, mas 30$ al mes de seguro de inquilino, pero mi vecino que tiene tres hijos y dos perros pasa de los 2200.”
Como ves, en Estados Unidos no se discrimina a nadie.
Simplemente le ponen precio al riesgo.
Te gustará mas o menos, pero este es el modelo que se impondrá aquí tarde o temprano.
Y cuando lo comenté en Linkedin el otro dia, tras mi ultima newsletter, no tardaron en aparecer los haters llorones.
Que si los agentes somos unos estafadores…
Que si estamos encareciendo el mercado…
Que si nos lo llevamos muerto solo por abrir puertas…
Que si…
Me emociona tanto piropo junto.
Esta gente es la misma que se queja cada vez que sale un piso porque dicen que contactan 3.000 personas y las inmobiliarias ni les cogen el teléfono ni les dan cita.
Pero ellos prefieren seguir llorando.
Prefieren que las inmobiliarias dejen de ganar dinero a contratar un servicio que les facilite la vida.
Eso solo tiene un nombre:
Mentalidad de pobre.
Desde hace mucho tiempo decidí alejarme de este tipo de personas.
Lo bueno es que, como esta gente se pasa el dia mostrando sus argumentos de pobre, es fácil identificarlos.
Fácil identificarlos y fácil esquivarlos.
Desde que los esquivo me va mejor, tengo mas alegría, me brilla más la piel y parezco mas joven.
Y vendo más pisos.
En el enlace de arriba
Ja ja ja ja, qué bueno!!