Si viste la entrevista que te puse por aqui el otro día, lo que voy a decir ahora ya te lo sabes.
Si no la viste, puede que no lo sepas.
Pero como no quiero ser malo te lo vuelvo a explicar.
En un momento dado, Borja, el crack que me hace la entrevista, me pregunta que qué tiene que tener una newsletter para que funcione.
Y yo le digo que tiene que tener 3 cosas.
Tres:
Entretener
Aportar valor
Vender
Esto no es que me lo haya inventado yo, sino que es la primera ley del copywriting.
Y no me vino por inspiración divina, sino que lo aprendí de los mejores copywriters de este planeta azul.
Una de ellos, ellas, elles es Laura Yago (para los amigos, Yager).
Laura Yago tiene una forma de ver la vida peculiar.
Según ella tu cliente está aburrido de ir por un mundo triste y gris. Y para que te compre algo tienes que desaburrirle con tus palabras.
Primero le desaburres y luego utilizas la persuasión para que te compre.
Ojo.
La persuasión no es un arte milenario que tengan oculto algunas personas para manipular a otras, sino que es una destreza entrenable.
Por eso ella se define como “Obrera de la persuasión”.
Y como obrera de la persuasión que es, yo me la imagino, cada dia, de 9 de la mañana a 5 de la tarde, en una cadena de montaje de una fábrica cualquiera ataviada con un mono azul y un martillo de reventar cabezas, machacando uno tras otro todos los craneos aburridos que van pasando por una cinta.
8 horas al dia reventando cabezas.
Pura persuasión.
Y no ando muy lejos de la realidad, pues basicamente a esto se dedica la gran Laura Yago.
A reventar cabezas una tras otra, pero no a base de mandobles, sino con su newsletter.
Su newsletter es peculiar y está llena de perlas.
De frases para enmarcar.
Por ejemplo, esta:
“El mejor anticonceptivo es un hombre aburrido”.
O esta otra:
“Vender es sexy”.
O estas:
“A nadie le importa quien coño seas, que coño hagas ni cuanto tiempo lleves haciendolo. A la gente solo le importan ellos mismos. Y para que te compren lo primero que tienes que hacer es meterte en su cabeza.”
“Una historia bien contada es el arma de ventas mas poderosa.”
Podría seguir así eternamente.
Pero para que entiendas todo esto, rescato un texto de sus newsletters que te abrirá los ojos y comprenderás el poder de saber contar historias.
Atento:
Su cama se encontraba cerca de la única ventana existente. A su lado, otra compañera de habitación igualmente grave, yacía acostada sin poder incorporarse.
La que estaba cerca de la ventana describía para ella todo lo que veía a través de ésta.
Por lo visto, la ventana daba a un lago. En él nadaban cisnes y patos. Los niños se acercaban entre risas a darles de comer. También había barcas de alquiler en las que se divertían parejas de enamorados.
Una anciana encantadora acudía a dar migas de pan a las palomas.
Los árboles eran grandes, majestuosos. Debajo de ellos, había unos preciosos bancos de mármol.
También había un jardín lleno de flores de todo tipo, con un seto a su alrededor.
A veces se veía al jardinero recortar el seto y darle forma de un animal que parecía una gacela…
Un día murió la mujer de al lado de la ventana.
Su compañera pidió a la enfermera que le cambiara a la cama cerca de la ventana y que le recostara para poder mirar por ella.
Entonces descubrió que ésta daba a un muro de hormigón vacío y gris.
Pues eso.
Que si tienes un negocio y no estás utilizando la magia de las historias bien contadas para vender, estás perdiendo el tiempo.
Y si no sabes como contarlas, Laura Yago te enseña a escribir para vender.
En el enlace de arriba.